Pulsera rígida elaborada en plata ley .925 con un diseño de greca continua que aporta dinamismo y elegancia. Al centro, una barra de ópalo resalta con su brillo iridiscente, aportando un contraste vibrante que da vida a la pieza. La combinación entre el patrón clásico y la luminosidad del ópalo crea una joya sofisticada y con identidad propia.